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Los verbos en infinitivo se pueden usar como objeto de la preposición en una oración. Ejemplos: Marta usa anteojos para leer. Recibí un premio por participar. Héctor preparó la cena después de ver la película; Comandos e instrucciones. Los infinitivos se usan como comandos.
Los verbos en infinitivo son formas no conjugadas de los verbos. Como tal, representan la idea pura de la acción sin especificar quién la realiza ni en qué tiempo se lleva a cabo. Por ejemplo, en la frase «me gusta correr», el verbo infinitivo «correr» no nos señala quién corre ni cuándo lo hace.
Semánticamente, los infinitivos verbales se asemejan a los sustantivos deverbales formados con -ción, -miento y otros sufijos, ya que denotan acciones, propiedades o estados. En lo que respecta al tiempo, dado que el infinitivo no lo expresa por sí mismo, se interpreta en función de las palabras a las que se subordina.
El infinitivo es un elemento clave en la gramática española que nos permite comprender y utilizar los verbos de manera correcta. Conocer los diferentes tipos de infinitivo y sus usos nos ayuda a mejorar nuestra habilidad para comunicarnos en español.
El infinitivo es una de las tres formas no personales del verbo y se forma con las desinencias verbales “-ar”, “-er” o “-ir”, dependiendo de si se trata de la 1.ª, la 2.ª o la 3.ª conjugación. De toda la conjugación, el infinitivo es la palabra que representa al verbo.
Ejemplos de verbos en infinitivo. Según cómo sea su terminación, los verbos en infinitivo se clasifican en: Primera conjugación. Son los infinitivos que terminan en-ar. Segunda conjugación. Son los infinitivos que terminan en -er. Tercera conjugación. Son los infinitivos que terminan en-ir.
Un verbo en infinitivo es la forma básica de un verbo que no está conjugado y no está vinculado a un sujeto en particular. En español, los verbos en infinitivo se caracterizan por terminar en -ar, -er o -ir. Algunos ejemplos de verbos en infinitivo son: amar, comer y vivir.